miércoles, octubre 11, 2006

Una de dragones

De nuevo el fatídico día once, en un mes cualquiera. De nuevo una aeroplano [bastante pequeño éste, hay que admitirlo] que se estrella contra un edificio en Nueva York. De nuevo la paranoia, la cobertura informativa, el escándalo mundial y los escenarios apocalípticos; de nuevo un conflicto que pensábamos saldado desde las postrimerías de la Edad Media: Oriente y Occidente enfrentados por la fe, el dinero y el poder.

En fin, esperemos que sean pocos los días once con el mismo sino. Por lo demás, podemos decir con certeza: "esta película, ya la vi".

martes, octubre 10, 2006

Cuando me busco en tu cuerpo
















"Reflejos" de Perla Cristal Gómez.
http://sadness.gr/galleries/perla_cristal/index.html

Cuando me busco en tu cuerpo
El viento sonríe a mi espalda:
Todo puerto es destino seguro
Todo rumbo converge en el regazo materno:
Tanta sed, tanto sueño, tanta urgencia
A mitad del camino
A mitad de la noche
Que se vuelve sobre sí misma
Y amenaza convertirse en ola perpetua.

En las dunas y en tu vientre
El mar es infinito
Una ventana con vista al cielo
La resistencia misma a flor de piel
Un camino, un huerto
Donde la vida germina y sonríe;
La más pequeña caricia es un caldero
Donde pernoctan tus ansias y las mías
Es un solar donde crece la grama
Sin que nadie atormente sus raíces
Sin que nadie descubra
Los nombres que la noche nombra.

Cuando me busco en ti
En los parajes de tu calle empinada
En la planicie que bordea tu torso
Es en tus ojos donde me encuentro
Desnudo y triste, frágil y taciturno,
Es en tus manos, donde un sol cae a tumbos,
Donde recupero la forma extraviada
A golpes de ausencia,
Es en tu aliento donde hallo
cobijo, cama y mesa.

Sin embargo,
Cuando te busco en mi,
Toda búsqueda es en vano:
La noche es una tumba de mármol
El sol, un eclipse perpetuo
Y el desierto, un camino
eterno, infinito, eterno.

lunes, octubre 09, 2006

Un mes pasa volando

En efecto, el tiempo vuela, inmisericorde siempre.
Ante cualquier descuido, ya ha pasado la cita que esperábamos con ansia, la fecha de pago de las tarjetas de crédito, el día en que transmitirían por televisión la película inconseguible, la mañana de cita médica obligada, incluso, las fiestas de guardar.

El tiempo se va así, como el aire, se diluye sin darnos cuenta.

Ahora estamos casi a mitad de octubre y muy pronto, trascurridas estas horas, noviembre nos caerá encima con sus aires funestos, sus tintes revolucionarios y sus premoniciones pascuales.

Transcurridas esas jornadas, eses meses, estos años, uno se preguntará ¿qué ha sido de mi vida, de todos estos días vividos como en un sueño?